Muchas personas no saben decir que no. Y este simple hecho les reporta una serie de consecuencias negativas a lo largo de su vida de la que no son conscientes pues si lo fuera aprenderían desde ya a decir que no. ¿Eres de los que no saben decir que no? hoy es un buen día para empezar a practicar, practica la asertividad y el amor propio para transformar tu vida en una vida mejor para ti.
Se trata de asertividad, aprender a decir no de manera respetuosa. Hay muchas personas que no saben decir que no y cuando al final ya dicen que no están tan cargados que lo dicen de malas maneras.
Decir no no implica ser malas personas
Hay que cambiar la forma de pensar respecto este termino porque decir que no, no implica:
Ser malas personas
Ser egoístas
Ser faltos de empatía
Decir que no es un derecho propio para salvaguardar los propios intereses. Es muy importante saber decir que no, sobre todo para proteger los propios límites.
No hace falta dar muchas explicaciones
Cuando se presente una situación en la que tengas que decir que no, no te compliques y no des demasiadas explicaciones, simplemente deja clara tu postura t di no de la manera más tranquila y respetuosa que puedas. No obstante, tienes que estar preparada, preparado para recibir críticas, pues si toda la vida has estado diciendo que sí a todo las reacciones de las personas de tu alrededor pueden ser de sorpresa, incluso se pueden sentir molestos.
Al final sí o sí vas a tener que decir que no porque hay que poner unos límites personales que somos los primeros que debemos respetar.
Qué conlleva decir que no a nivel personal
Empezar a decir tiene muchas implicaciones positivas a nivel personal. Decir que no va a hacer que empecemos a respetarnos más a nosotros mismos, empezar a querernos, comenzar a demostrar a todo el mundo que no siempre vamos a estar ahí de manera servil.
Esto al final tiene mucho que ver con la dependencia emocional, te dejo el enlace al vídeo porque seguro te puede interesar:
Al final lo que tiene que quedarnos claro es que no es necesaria la aprobación de los demás para sentirnos bien sino la tuya propia, lo más importante es estar bien con uno mismo para poder estar bien (después), con los demás, y no al revés.
Es importante empezar a demostrar que no siempre vamos a estar ahí de forma servil, en la obligación de los deseos de los demás. Estamos en la obligación de nuestros deseos, de nuestras ilusiones, de nuestras tareas.